Durante la extrusión de productos de plástico se producen residuos con propiedades y formas muy variadas (por ejemplo, productos de plástico semiacabados, perfiles, tubos, placas, trozos y pequeños recortes). El tipo, la forma y las propiedades de los productos a triturar determinan la configuración del proceso de alimentación y trituración.
El tamaño de las partículas trituradas que se pretende obtener varía dependiendo de la aplicación final deseada. Aunque para muchas aplicaciones es suficiente con 4 - 8 mm (idealmente sin polvo), también se pueden requerir finuras similares a la del polvo. Para el sistema como tal, es importante que pueda limpiarse rápida y fácilmente, especialmente cuando los productos procesados cambian.
Por lo general, se requiere una supervisión continua de la alimentación, ya que la adición descontrolada de material es una causa frecuente de interrupciones en el proceso de producción. En el peor de los casos, una alimentación excesiva de material puede provocar el "agarrotamiento" del sistema, y, si la alimentación de material es insuficiente, será a costa de la rentabilidad.